Monday, November 27, 2006

Amores lejanos

Ciro Bianchi Ross... Tomado de Juventud Rebelde.

¿Sabía usted que era cubana la mujer que inspiró a Saint-John Perse –Premio Nobel de Literatura en 1960- su célebre poema “A la extranjera”? ¿Que el gran amor de Ernest Hemingway en La Habana fue una mulata llamada Leopoldina, y que el escritor la inmortalizó en una novela con el nombre de Liliana, la Honesta? ¿Que una de las últimas amantes del dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo fue una rumbera cubana? ¿Qué el boxeador Kid Chocolate tuvo amores con actrices como Pola Negri y a Misttinguette? ¿Que José Raúl Capablanca se casó con una princesa rusa auténtica y que Alfonso de Borbón, el primogénito de Alfonso XIII y tío del rey Juan Carlos, renunció a su derecho a ocupar el trono de España para casarse con la cubana Edelmira Sampedro? ¿Que Miguelito Valdés sostuvo una relación con Patricia Hill, la llamada reina de la mafia, que vivía obsesionada con el diente de oro que lucía el cantante? ¿Que el jefe mafioso Meyer Lansky tuvo mujer cubana durante años y que la llevó consigo cuando salió definitivamente de Cuba en 1959? ¿Que Ava Gardner, “el animal más bello del mundo”, como le llamaba su amigo Hemingway, se entregaba aquí a auténticos maratones sexuales y que aunque tenía amantes blancos más o menos fijos, se las arreglaba siempre para colar algún que otro negro en su suite del Hotel Nacional? ¿Que era cubana la “marca de fábrica” de los mellizos de Tongolele? ¿Que el teatrista Gerardo Fullera León se llevó una tarde a la cama a Margarita Duras, la autora de Hiroshima, mi amor? ¿Que el dictador Fulgencio Batista vivía enamorado de Rosita Fornés, la mujer más deseada de Cuba?

En Cuba hay médicos e investigadores cuyos nombres dan la vuelta al mundo. Y escritores, actores, deportistas, compositores, intérpretes, realizadores cinematográficos… En esa relación de famosos, por una razón u otra, quedan siempre fuera los amantes. Y amantes y grandes amadores y donjuanes y mujeres que amaron o se dejaron amar los hay aquí por montones dignos de figurar en la galería más selecta.

DOÑA LEONOR Y LA EXTRANJERA

La relación, de ser cronológica, comenzaría con Leonor –o Inés o Isabel- de Bobadilla, la esposa de Hernando de Soto, el afiebrado explorador que luego de haber jugado al ajedrez con el Inca Atahualpa, que era su prisionero, buscó sin encontrar, en 1539, en la Florida, la fuente de la eterna juventud. Soto gobernó la Isla a partir de 1537 y cuando partió a su aventura dejó a doña Leonor al frente del gobierno. Aunque el historiador Pezuela dice que esa autoridad fue “puramente nominal”, el caso es que nunca antes ni después una mujer desempeñó aquí tamaña responsabilidad.

Cuenta la leyenda que todas las tardes subía la señora a la torre del primitivo Castillo de la Fuerza a atisbar en el horizonte el regreso del marido. Pero Hernando de Soto jamás volvió. Murió en la Florida y sus compañeros lo enterraron en el lecho de un río para evitar que los indios profanaran su cadáver. Un siglo después los habaneros, en recuerdo de doña Leonor, que esperó y esperó y quedó a la postre sin respuesta, hicieron fundir en bronce la imagen de una mujer que porta en su mano izquierda la Cruz de Calatrava y la colocaron en lo alto de la torre de homenaje del Castillo con el fin de que indicara a los navegantes la dirección del viento. La llamaron La Giraldilla y simboliza a La Habana.

Demos ahora un salto en el tiempo. El 16 de mayo de 1874 contraen matrimonio en la ciudad central de Santa Clara, Luis Estévez y Romero y Marta Abreu. Él es un distinguido abogado –con bufete en la calle Obispo, 27- y profesor de la Universidad. Ella, una de las mujeres más acaudaladas de Cuba, benefactora de esa ciudad y sólido sostén económico de la causa de la independencia, a la que hace cuantiosas donaciones, como aquellos cien mil pesos que puso en manos del Partido Revolucionario Cubano al enterarse de la muerte de Maceo. Instaurada la República, Luis Estévez fue su primer vicepresidente, pero inconforme con la política de Estrada Palma, renunció a ese cargo en 1905 y volvió, junto con su esposa, a instalarse en París. Allí Marta enfermó. Cuando falleció, el 3 de enero de 1909, Estévez debió ser internado en una clínica siquiátrica, y justo un mes después del deceso, en un gesto dramático y desolado, se quitó la vida con un pistoletazo. Tal era el carácter de Marta, tal su temple, que la gente decía que Luis Estévez fue vicepresidente de la República y vicepresidente de su casa.

Y con Marta se relaciona “la extranjera” de Saint-John Perse, pues esta enigmática mujer, cuya verdadera identidad se mantuvo oculta durante cuarenta años, era su sobrina Rosalía Sánchez Abreu. Lilita le decía su familia. Lil le llamaba el poeta que, al evocarla ya casi al final de su vida, en 1975, confesaría que “nunca tuve relaciones parecidas con otro ser”.

Lil y el escritor francés se conocieron en 1932 y “A la extranjera” fue el regalo de despedida que el poeta le hizo cuando, años después, se separaron por última vez, en Washington. Sin embargo, Perse no olvidó nunca a la cubana y todavía en 1953 le hacía llegar este mensaje: “Quisiera que ella sepa que permanecerá para siempre en lo mejor de mí mismo, que ella es mucho de mí mismo, que mi corazón sigue emocionándose cuando pienso en ella, y que el lazo que existe entre nosotros seguirá siendo para mí, quizás contrariamente a lo que ella siente, excepcional hasta mi muerte”.

La muchacha estaba casada, al menos desde 1928, con un sujeto llamado Alberto Henralix o Henrahx, que de las dos maneras aparece escrito en las guías sociales de la época.

LA REALEZA

Fue un amor a primera vista el de Alfonso de Borbón, Príncipe de Asturias, y Edelmira Sampedro (en la foto). Se vieron una noche en un cinematógrafo de la ciudad suiza de Lausana y se enamoraron.

Todo lo tuvo en contra la joven pareja desde el comienzo. La familia real española no aceptó el noviazgo, y Edelmira debió sufrir bien pronto las presiones de los enviados de Alfonso XIII, ya exiliado en París, que privó al hijo de sus cinco automóviles, redujo sensiblemente su mesada y lo obligó, en definitiva, a renunciar a su derecho a la sucesión. Ningún miembro de la Casa Real asistió a la boda, en Lausana, el 21 de junio de 1933, y las invitaciones que el ya Conde de Covadonga cursó a amigos y conocidos, le fueron devueltas “con sentimiento”.

Los celos desmedidos de Edelmira, por un lado, y la hemofilia que aquejaba a Alfonso, por otro, harían muy difícil la vida en común. Rompe la pareja sus relaciones una y otra vez, pero se reconcilia siempre hasta que en 1937 ella lo acusa de tener otra mujer. Es el fin. En Nueva York, Alfonso pedirá la anulación el matrimonio, y Edelmira, en La Habana, el divorcio.

La acusación de Edelmira tenía, esa vez, una base real. Alfonso estaba viéndose en secreto con otra cubana, la modelo Martha Rocafort. Se casarían en La Habana, en junio de 1937. ¿Llegó Martha a ese matrimonio impulsada por el amor o por el interés?

Un familiar cercano suyo confesó a este periodista que, aunque no descartaba la posibilidad de atracción física, se inclinaba más por lo segundo que por lo primero. Y de una opinión más o menos similar fue Zenobia Camprubí, la esposa de Juan Ramón Jiménez, que siguió en La Habana las peripecias de la relación. “Ojalá sean felices, escribió Zenobia en su diario, pero parece un matrimonio de conveniencia”.

Amor o interés, esta relación duró muy poco. En septiembre, tres meses escasos después de la boda, Martha solicitó el divorcio. Se negó a soportar las crisis alcohólicas de Alfonso que desencadenaban lo peor de su carácter y lo llevaban a crudas agresiones verbales y a la violencia física.

LOS DICTADORES

Aunque se dice que, en su temprana juventud, pasó una temporada en la ciudad oriental de Santiago de Cuba, el generalísimo Trujillo jamás logró que se hiciera realidad su caro anhelo de que lo invitaran a visitar la Isla de manera oficial. Vivía obsesionado con todo lo cubano: era cliente de la mueblería la Moda, de La Habana; se vestía con sastres cubanos y eran cubanos los médicos que lo atendían. Gran bailador, presumía de Don Juan y gustaba que sus romances y aventuras amorosas fueran de dominio público porque, a su juicio, confirmaban su virilidad.

Trujillo tuvo también una amante cubana, la rumbera Silda. El autor de esta página vio una foto suya en la revista habanera Show. Tenía la piel color canela y una figura espectacular… Pese a los elogios que en esa publicación se le prodigan, nunca levantó cabeza en la vida nocturna capitalina: la competencia era mucha. En Santo Domingo, sin embargo, logró notoriedad, si no por su arte, sí por su relación con el dictador, que un día, tal vez para quitársela de encima, la envió a España a fin de que filmara una película. Y en Madrid la sorprendió el ajusticiamiento del sátrapa, el 31 de mayo de 1961. Pero Silda no quedó abandonada a su suerte. Un jeque árabe, petrolero y millonario, cargó con ella.

¿Y lo de Batista y Rosita? Lo cuenta la propia vedette en sus memorias. El dictador cubano la acosó durante largo tiempo y cuando se hizo pública su relación con el actor Armando Bianchi, la persecución se extendió a los dos. El asedio iba desde multas por insignificantes infracciones de tránsito y largas retenciones en estaciones de policía hasta presiones por parte de agentes del servicio secreto y consejos de personas aparentemente ajenas al asunto que instaban a la actriz y cantante “a portarse bien”. El hostigamiento subió de tono cuando Rosa, en 1957, se estableció en España por motivos de trabajo. El gobierno cubano le prohibió entonces que sacara a su pequeña hija del país.

“Batista me hizo daño con eso, mucho daño”, dice ella en sus recuerdos.

EL DIABLO EN EL CUERPO

En Islas en la corriente, Hemingway traza esta descripción de Liliana, la Honesta:

“Tenía una hermosa sonrisa, unos ojos oscuros maravillosos y espléndido pelo negro (…) Tenía un cutis terso, como un marfil color olivo, si tal marfil existiera, con un ligero matiz rosado…”

Liliana la Honesta se inspira en un personaje real, una prostituta que hacía la vida en el bar-restaurante Floridita, de La Habana. Se hacía llamar Leopoldina, -tal vez no fuera ese su nombre verdadero- y el gran escritor norteamericano mantuvo con ella un amor clandestino que se extendió a lo largo de muchos años.

Antonio Meilán, barman de ese establecimiento, que la conoció mucho y fue testigo mudo de aquel romance, la recordaba todavía en 1992. Contó entonces a este periodista:

-Una mulata fina, elegante, bellísima con su sonrisa deslumbradora, sus piernas larguísimas, las caderas rotundas, los pechos breves y aquel rostro en el que se agolpaban toda la picardía y la gracia de la cubana.

Añadió:

-¡Eso sí era una hembra! Tenía el diablo en el cuerpo…

Leopoldina murió de cáncer, en 1951. Hemingway corrió con los gastos del sepelio. Y fue el único hombre que la acompañó hasta la tumba. Ese día, en el Floridita, bebió más de lo habitual

Pánico en El Ocujal



.Durante la última contienda anticolonialista, iniciada el 24 de febrero de 1895, Máximo Gómez infligió una inesperada derrota a los españoles en El Ocujal, territorio actual de Majagua

Por Félix Jorge Guerrero Vega...pERI{ODICO INVASOR CIEGO DE AVILA.
Ilustró: R. Alfonso

Las fuerzas al mando del General en Jefe libraron la brillante Campaña de La Reforma en un reducido espacio. Decidió ejecutarla el general Máximo Gómez en una región que conocía a la perfección, donde asentó su casa cuando la Guerra de los Diez Años y le nació su hijo Panchito.

El área seleccionada limitaba, por el norte, con el camino de Morón a Chambas; al sur le quedaba la franja pantanosa de la costa; la Trocha militar de Júcaro a Morón en el extremo este, y los ríos Jatibonico del Sur y Jatibonico del Norte le servían de tope al oeste. Pero el Generalísimo operó, casi siempre, en una zona más reducida, de aproximadamente 70 kilómetros cuadrados, situados entre La Gloria, El Jíbaro, La Majagua, Piedras, Arroyo Blanco, Jatibonico e Iguará.

Su concepción de la Campaña quedó clara cuando le expresó al general Freyre de Andrade: "Si voy para La Habana, se acaba la guerra en Occidente y le doy el gusto a Weyler (…) y en cambio, si me quedo aquí, obligo a Weyler a venir a buscarme, y como tiene mucha gente en trochas y líneas militares que torpemente sostiene (…), tendrá que sacar soldados de Pinar del Río, Habana, Matanzas y Sagua para perseguirme. De esta forma las fuerzas en estos territorios tendrán respiro (…)."

Durante esta campaña las fuerzas a su mando oscilaban entre 3 500 y 4 000 efectivos, sin embargo, el mando español contaba en este espacio con más de 40 000 soldados con el mejor armamento de la época.

La Campaña de La Reforma se inició el 27 de enero de 1897 con el ataque al poblado de Arroyo Blanco, y se extendió contra Weyler hasta octubre. Lo sustituyó el general autonomista Ramón Blanco, al que Gómez enfrentó hasta finales de enero de 1898. Decidió este oficial trasladar sus operaciones hacia el valle del Cauto, en la entonces provincia de Oriente, luego de haber fracasado como el anterior en sus intentos de derrotar al General en Jefe.

Blanco envió numerosas fuerzas para perseguir a Gómez, sin embargo, resultaron infructuosos los esfuerzos por derrotarlo. La activa y profunda exploración y la movilidad combativa de los mambises les permitieron desgastar, de forma sistemática y con métodos certeros, a sus perseguidores, evadirlos cuando eran muy fuertes y batirlos cuando las circunstancias lo aconsejaban.

De lo efectivo de esta táctica da prueba el combate de El Ocujal, lugar situado al norte del actual municipio de Majagua. La acción ocurrió el 29 de noviembre de 1897. Se produjo un inesperado encuentro por fallas en la seguridad durante la marcha de ambos contendientes. Gómez reaccionó antes que su adversario y cargó de forma sorpresiva sobre la vanguardia enemiga, como era característico en su actuar.

Rincón de Guano, punto cercano a Los Hoyos, servía de campamento al Cuartel General. Ese día fresco de noviembre Gómez dio la orden de partir.

Lo acompañaban su Estado Mayor y 50 soldados de su escolta. En aquel sitio queda el coronel Armando Sánchez Agramonte al mando del resto de su tropa. Las fuerzas del dominicano marcharon por el camino de Río Grande con rumbo norte. Al llegar a la finca de El Ocujal la vanguardia pasó adelante.

El sargento de la escolta, Sacramento Barreto, que cubría este sendero, hizo fuego a una columna enemiga que venía en sentido contrario. Era un momento terminante, no podían titubear. Si flaqueaban y retrocedían, el enemigo superior en efectivos se les echaría encima y les tomaría el factor sorpresa.

El General en Jefe gritó: "¡A la carga!" Y fue el primero en disparar su revólver. Todos lo siguieron con ímpetu, y la fuerza peninsular resultó sorprendida, como no pudo contenerlos, retrocedió a desbandada. Las fuerzas mambisas los fusilaron a quemarropa, mientras ellos trataban de defenderse. Los winchésteres dispararon repetidamente, el machete causó sus estragos y cayeron unos tras otros los soldados españoles.

"Aquellos fueron momentos de decisión. Nuestros contrarios quedaron atónitos ante aquel arrollador empuje y el destrozo fue de una manera tal que revelarlo causaría risa. Es increíble el pánico de aquella fuerza española; solo presenciándolo se podía creer", narra el corneta del Generalísimo, comandante José Cruz y Pérez. Cuando el enemigo vino a darse cuenta, ya el General en Jefe, con parte de su pequeña fuerza, siguió tranquilamente su marcha hasta Palma de las Grullas, donde se le incorporó el Jefe de su Estado Mayor, Bernabé Boza, con el resto de la escolta, que se había quedado batiendo la desecha tropa enemiga, la cual retrocedió a Río Grande con sus muertos y heridos.

De los 80 efectivos que componían la columna española, sufrieron 33 bajas entre muertos y heridos, según partes de la propia prensa peninsular.

"Nosotros no tuvimos ni una baja. Esto parecerá increíble, pero es verdad, ¡sí, señor!" Así describe Boza en su diario sobre aquel acontecimiento en El Ocujal, que llenó de pánico a las huestes colonialistas, a la vez que demostró la táctica seguida por Gómez durante la guerra.

UNA EXPEDICION MAMBISA POR UNA COSTA CUBANA. OBSERVE EN LA PARTE DELANTERA E INFERIOR DE LA FOTO LAS CAJAS CON LOS PERTRECHOS MILITARES.

A 135 años del crimen del 27 de Noviembre

Por Juan E. Batista Cruz

Es evidente que, a través de la historia de Cuba, ha existido un relevo de las fuerzas del mal, esas que se incuban en los hombres desnaturalizados y destilan odio y sed de venganza contra los patriotas que lucharon, luchan y lucharán por mantener la independencia conquistada a sangre y fuego.

Este 27 de noviembre se cumplirán 135 años del horrendo crimen cometido por el colonialismo español en las personas de ocho inocentes estudiantes del primer año de medicina, por el solo hecho de ser cubanos.

El cuerpo de voluntarios de La Habana, una institución paramilitar integrada por peninsulares radicados en Cuba, que llegó a contar con alrededor de 30 mil efectivos; representaba lo más retrógrado de la Metrópolis, al extremo de que las autoridades llegaron a sentir temor de la reacción de aquellos vándalos, si no se cumplían sus exigencias.

La lucha por la independencia había comenzado el 10 de octubre de 1868 en La Demajagua y el colonialismo español se propuso mantener la posesión de Cuba a toda costa, aunque hubiese que exterminar a la población criolla.

El cuerpo de voluntarios era una herramienta ideal para esos propósitos y solo bastó que cinco estudiantes de primer año de medicina se recrearan un rato alrededor de la tumba del reaccionario periodista español Gonzalo de Castañón, en el cementerio de Espada, para que la clase entera fuera acusada, sin prueba alguna, de profanar el nicho.

El odio incontrolable a todo lo nativo provocó la celebración de dos Consejos de Guerra, el primero de los cuales no pudo aplicar condenas severas, sobre todo por la brillante defensa del capitán Federico Capdevila Muiño, quien estuvo a punto de ser asesinado por los voluntarios por el solo hecho de asumir una actitud digna.

La protesta de los voluntarios puso a toda La habana en tensión y fue ilegalmente convocado otro Consejo de nueve jueces, siete de ellos integrantes del recalcitrante cuerpo. Los cinco muchachos que retozaron sanamente en el cementerio fueron condenados a morir por fusilamiento, junto a otros tres, escogidos por macabro sorteo, entre ellos Carlos Verdugo, quien el día de los hechos se encontraba en Matanzas.

En nuestro devenir histórico y tras la acción escamoteadora del imperialismo yanqui cuando la victoria de las armas cubanas era un hecho, nuevos “voluntarios” al servicio de los neocolonialistas, nacidos en Cuba por casualidad; siguieron masacrando a la juventud heredera de las mejores tradiciones de lucha, solo por complacer los designios del poderoso vecino.

Por algo Fidel, en su alegato de autodefensa La historia me absolverá, en el juicio por los sucesos del 26 de julio de 1953, acusó a Batista y sus esbirros de multiplicar por 10 el crimen cometido contra los ocho estudiantes de medicina en 1871.

Revueltas en su cubil, las bestias no admiten la realidad de que el pueblo de Cuba está orgulloso de la libertad nacida aquel luminoso primero de enero de 1959. Las fuerzas del mal, siguen con su relevo histórico y a través de los “voluntarios de nuevo tipo”, léase mafiosos sin alma y sin decoro; continúan su campaña de odio y muerte contra millones de inocentes, a quienes intentan rendir por hambre y enfermedades, mediante el más criminal bloqueo que se haya aplicado jamás en el mundo.

Así, hicieron estallar en el aire un avión civil con 73 personas inocentes a bordo, frente a las costas de Barbados el 6 de octubre de 1976, el más horrendo de los cientos de crímenes cometidos en estas casi cinco décadas de Revolución; además de organizar cientos de atentados fallidos contra nuestro Comandante en Jefe.

Es la rabia y la impotencia, la misma sed de venganza de aquel bárbaro asesinato que segó la vida de estudiantes casi niños que, como Alonso Álvarez de la Campa, contaba solo con 16 años de edad.

Esos diabólicos sentimientos, relevados y renovados, son el móvil que llevó al amañado e ilegal juicio en Miami contra Gerardo, René, Fernando, Ramón y Antonio a quienes, como aquellos jóvenes de hace 135 años, les aplicaron condenas excesivas con el único objetivo de “castigar” a Cuba.

Este imperio neocolonial o más bien fascista, utiliza los mismos métodos, en esencia persiguen similares objetivos: doblegar por cualquier vía nuestra resistencia a sus pérfidos designios o hacernos desaparecer de la faz de la Tierra.

Pero ni antes, con los crímenes como el del 27 de noviembre y el de la Reconcentración de Wéyler, ni el de ahora, con el trasnochado Plan Bush para una “transición democrática”, las fuerzas del mal podrán doblegar a un pueblo unido y dispuesto a ganar las batallas, no solo la de las ideas; sino las del combate frontal si se atrevieran a repetir sus aventuras de Afganistán o Iraq.

Cuba no teme, porque como dijera nuestro José Martí en su inmortal poema 27 de Noviembre, “Cuando se muere en brazos/ de la Patria agradecida/ la muerte acaba/ la prisión se rompe/ empieza al fin/ con el morir la vida.”







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Monday, November 20, 2006

FOTOS DE MAMBISES.

Saturday, November 18, 2006

El último superviviente

Por Lázaro David Najarro Pujol

Un grupo de estibadores de azúcar carga sobre los hombros, como si fuera un niño, a un hombre. El Guajiro viene al frente de los estibadores. Caminan rumbo a la línea del ferrocarril. El Guajiro Bolongo sujeta al hombre que no deja de sonreír.

—No me dejen caer que me pueden dar un golpe.

—No se preocupe que no le pasará nada —asegura uno de los estibadores.

De esa manera casual José Cañete Fonseca conoce al gran mambí:

Camino, como es de costumbre por las calles de Santa Cruz. Me fijo que el hombre que llevan cargado es un viejo de estatura pequeña.

Le pregunto a Raúl García:

—¿De quién se trata?

—Coño, Pepelín, aquí todos lo conocemos.

El viejo continúa en hombros de los estibadores.

—Mire Pepelín, ahora lo llevan para el Centro de Veteranos que se encuentra en la calle Línea. El viejo viene a cobrar su pago todos los meses y los estibadores saben cuándo le corresponde y no lo dejan caminar. Es la forma de rendirle homenaje al viejo.

—¿Pero quién es? ¿Por qué ese homenaje? —pregunto nuevamente.

—Se llama Aniceto Recio. ¿Quién no conoce a Aniceto Recio Pedroso? Es un sobreviviente de la caballería del Mayor General Ignacio Agramonte; participó en el rescate de Julio Sanguily.

En este instante tengo el privilegio de conocer a tan insigne patriota de nuestra guerra independentista y libertadora. Luego visito su humilde hogar allá en “Las Uvas”. Aniceto no conserva muchos trofeos de la guerra. En su casa guarda con amor una bandera cubana muy pequeña. En la sala se destaca una foto del bravo mambí y la medalla de la valiente acción en el rescate de Sanguily, entregada en la etapa neocolonial...

Aniceto Recio siempre estaba muy cerca de Agramonte porque formaba parte de su escolta. El oficial le había enseñado las primeras letras al muchacho, que se caracterizaba por su valentía, modestia y tenacidad. Con mucha razón Martí afirmaba que “En los lugares puros y apartados del campo se crían las grandes fuerzas” (1) , y Aniceto formó parte de esas grandes fuerzas.

Como muchos mambises, Recio Pedroso se encontraba el día 8 de octubre de 1871, junto a su jefe en el campamento. Todo transcurría en la más tranquila normalidad. Algunos insurrectos limpiaban sus armas y otros preparaban el machete de combate.

Muy temprano, ese día, el brigadier general Julio Sanguily sale del campamento acompañado por dos patriotas. Luego de una fatigosa marcha decide descansar unos minutos. Muy cerca de allí 120 jinetes españoles se percatan de la presencia de insurrectos en la zona de Matehuelo, en los potreros de Jimaguayú.

El general mambí se da cuenta de la proximidad de los soldados, pero cuando reacciona ya lo tenían rodeado. Luciano Caballero, uno de sus hombres, logra escapar y parte para comunicar sin demora el incidente.

Inmediatamente la tropa española, llena de regocijo, marcha hacia la ciudad de Camagüey con el prisionero. Los peninsulares tienen el propósito de mostrar a Sanguily como un gran trofeo y, posteriormente, fusilarlo a la vista de todos como un escarmiento.

Un mambí, Luciano Caballero, cabalgaba raudo en su corcel en sentido contrario a donde iban los españoles. Llega al campamento insurrecto y se lanza del caballo, aún con éste en marcha, para informar a El Mayor General Ignacio Agramonte de la detención del brigadier general.

En su libro Apuntes de Camagüey, Jorge Juárez y Cano describe el acontecimiento (2)

Ignacio escogió sólo los 35 jinetes que montaban mejores caballos y salió a batir la columna española, ordenando al capitán Reeve que le siguiera por el rastro.

Al llegar El Mayor a la finca de Antonio Torres divisó la retaguardia enemiga y moviéndose al grupo de valientes que le seguía, les dijo:

—El General Sanguily va prisionero en aquella columna enemiga; es necesario rescatarlo vivo o muerto, o todos quedar allí.

Y se dirigió al comandante Manuel Emiliano Agüero; con un gesto señaló la dirección de la columna y gritó:

¡¡Corneta toque usted a degüello!!

El clarín tocó nuestra típica “carga al machete”; el pelotón siguió el penacho blanco de Agramonte, y momentos después aquel puñado de jinetes desorganizó la fuerza enemiga que, gallardamente ripostó, pero fue arrollada y fusilada por 10 rifleros que pie a tierra, apoyaron la carga de los camagüeyanos.

El joven escolta Aniceto Recio, cabalgaba muy próximo a Ignacio Agramonte. Blandiendo el machete penetra como un rayo en la columna española y derriba a varios soldados. Un disparó lo alcanza; queda tambaleándose encima de la bestia y agarrado a su crin.

Cercano a El Mayor combate como un león el sargento primero Ramón Bueno. Un proyectil lo hiere gravemente y lo derriba del caballo. Mientras que el cabo Francisco Montejo, Ordenanza de Agramonte, se lleva las manos al pecho y cae mortalmente herido.

El general Sanguily iba bajo la custodia del sargento Lorenzo Plan que lo apresó, y en medio de la refriega se quitó el sombrero gritando: Viva Cuba Libre. Dicho sargento resultó muerto y Sanguily herido de bala en la mano derecha. (3)

La fuerte columna española, del Regimiento de Pizarro, al mando del comandante César Matos, se debilita poco a poco y pronto va en desbandada. Los jinetes de la caballería de Agramonte sincronizaban sus movimientos “como si se tratará de un solo cuerpo” (4)

Sobre las tierras de la finca de Antonio Torres quedan algunos muertos, heridos y prisioneros españoles, así como muchos caballos, armas, municiones, equipos y otros botines de guerra. Los cubanos tuvieron un muerto y varios heridos, aunque al siguiente día falleció el sargento primero Ramón Bueno.

El rescate del brigadier general Julio Sanguily se inscribe entre las acciones más brillantes del Mayor General Ignacio Agramonte Loynaz, quien en el parte oficial, narró ese el encuentro bélico con una sencillez extraordinaria: (5)

En la mañana del 8 de octubre salió del campamento el general Julio Sanguily. Sin escolta y sólo con dos hombres, cayendo en poder del enemigo, se componía éste de 100 hombres, montados del Batallón de Pizarro a las órdenes del Comandante César Matos.

Una hora después se me presentó en el campamento uno de los hombres que había salido con el general Sanguily, manifestándome lo ocurrido. Sólo con treinta y cinco jinetes bien montados podía contar en esos momentos para darle alcance al enemigo, y no había tiempo que perder, para hacer esfuerzos desesperados a favor de un jefe distinguido y un buen compañero.

Salí con ellos, logrando alcanzar al enemigo en la finca de Antonio Torres, cargué por la retaguardia al arma blanca, y a la invocación del nombre y a la salvación del general prisionero, los nuestros, sin vacilar ante el número ni ante la persistencia del enemigo, se arrojaron impetuosamente sobre él, le derrotaron y recuperamos el general Sanguily, herido en un brazo.

Pepelín Cañete, habla con mucho orgullo del santacruceño Aniceto Recio Pedroso: (6)

En Santa Cruz del Sur lo recuerdan como al mambí héroe, un hombre sencillo; con un inmenso poder en sus brazos y en el corazón.

A los 21 años se incorporó al Tercer Cuerpo del Ejército Libertador y participó en una batalla contra una fuerza mucho más poderosa que aquellos 35 jinetes extraordinarios que lograron su propósito, y se ganaron un lugar en la historia de Cuba.

Él nació el 12 de agosto de 1847, en Palma Hueca, situado en esa época en el antiguo barrio de Buenaventura, en Santa Cruz del Sur. Sus padres eran descendientes de esclavos y se dedicaban a labores del campo.

Leonardo Depestre, considera que “la acción, por inesperada; y la carga al machete; por su violencia y tenacidad, desconcertaron a los españoles: (7)

El rescate de Sanguilý causó admiración aún entre las tropas colonialistas y evidenció el irreductible espíritu combativo de los cubanos.

El Mayor demostró, con el rescate de Sanguily, que su caballería era capaz de competir con la mejor. Organizó su escuadrón para lograr una victoria segura. Contaba con el ejército regular más disciplinado.

Ya Ignacio lo había dicho en carta a su amada Amalia:

“Estoy preparando un escuadrón de caballería que dejará atrás a la caballería española” (8)

El Comandante del Ejército Libertador, Aniceto Recio Pedroso, el último superviviente del escuadrón más disciplinado de las tres guerras, se convirtió en uno de los principales protagonistas del Camagüey legendario.

Notas de referencia

(1) Tomado de Lecturas para niños, de Hotensia Pichardo, página 242.

(2) Tomado del Libro Apuntes de Camagüey, de Jorge Juárez y Cano, Imprenta Popular, 1929, página 130.

(3) Ramón Bueno, de la escolta de Agramonte, murió al siguiente día.

(4) Tomado del libro Apuntes de Camagüey de Jorge Juárez y Cano, Imprenta Popular (1929) Página 130.

(5) Tomado de la ponencia inédita Un jinete de la Caballería de Agramonte, del profesor Vilfredo Avalo Viamontes.

(6) Fragmentos del Parte oficial de Agramonte, tomado del periódico Adelante, 8 de octubre de 1975.

(7) Aniceto Recio Pedroso concluyó la guerra con los grados de Comandante del Ejército Libertador y prestó servicios hasta el 24 de agosto de 1898. Falleció en la finca “Las Uvas” en Santa Cruz del Sur, el 20 de julio de 1948 a la edad de 101 años; se encuentra sepultado en el cementerio de Guaicanámar. Fue el último sobreviviente del rescate de Sanguily. Participó en las tres guerras.

(8) Tomado de Cuba en Citas (1868—1898), de Leonardo Depestre, Editorial Gente Nueva, 1987, página 23.

Friday, November 17, 2006

Cubano Bruzón: tablas en primera partida por el título iberoamericano



Por Maryla García Santos

Huelva, España,(P-26).- Sólo 30 movimientos bastaron para que el GM cubano Lázaro Bruzón y su rival, el MI Manuel Pérez, acordaran tablas en la primera partida de la serie final del I Campeonato Iberoamericano de Ajedrez.

Bruzón (2648 ELO) tendrá mañana las mejores opciones para alzarse con la victoria y la corona, toda vez que jugará con blancas, lo que favorece su estilo agresivo. Aunque no se debe descartar una férrea oposición por parte del local Pérez, quien –según el criterio de la prensa española- ha sido la revelación del torneo.

De persistir el empate, habrá que recurrir a la serie partidas rápidas de 25 y cinco minutos, y de ser necesario, a la modalidad de armagedón.

Reynaldo Vera, el otro trebejista cubano que participa en el Iberoamericano, también hizo tablas en su enfrentamiento con el GM Henrique Mecking, de Brasil. Vera -que lucha por las ubicaciones del 9 al 24- acumula cinco puntos, igualado con su homólogo portugués, el GM Antonio Fernández, su contrincante este sábado.

El I Campeonato Iberoamericano de Ajedrez, con sede en el Convento de Las Mercedes, en Ayamonte, Huelva, se desarrolla desde el pasado 10 de noviembre, con la participación de 24 ajedrecistas de 16 naciones

Día Internacional del Estudiante



Por Graciela Guerrero Garay

LAS TUNAS- Una gran marcha realizaron hoy en la tarde los niños y jóvenes de este Balcón oriental, para reafirmar sus ideas revolucionarias en apoyo a Cuba y a todos sus hermanos del mundo que este Día Internacional del Estudiante son vejados de sus derechos a un pupitre y una libreta, sufren las secuelas de la violencia y tienen que ir a las calles a ganar el pan propio y de su familia.

La concentración recorrió las arterias principales de esta capital provincial con un marcado sentido de patriotismo, solidaridad y compromiso con la Patria y la humanidad, en tanto en todos los centros docentes del territorio hubo actividades de corte político, cultural, deportivo y recreativo en recordación a la fecha de los escolares del planeta.

Toda la Isla tuvo acontecimientos de este tipo en las escuelas primarias, secundarias básicas, preuniversitarios y las universidades, a la vez que las principales locaciones de los municipios cabeceras y la Isla de la Juventud se llenaron de esa alegría inherente a la más joven generación de cubanos, hoy protagonistas y beneficiarios de todos los Programas Priorizados de la Revolución y el bienestar social que les garantiza en Cuba un desarrollo integral desde el instante mismo en que la madre concibe el embarazo.

Unos siete mil pioneros e igual número de miembros de la Federación Estudiantil de la Enseñanza Media (FEEM), junto a tres mil universitarios, representaron al estudiantado tunero en este desfile, que terminará en el área de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en el recinto ferial del Parque 26 de Julio, en esta ciudad; donde los instructores de arte de la brigada José Martí realizarán un espectáculo cultural con artistas también de la Casa de Cultura Tomasa Varona.

En Las Tunas hay 104 mil 694 pioneros y estudiantes de la FEEM y la FEU, quienes están de plácemes hoy en sus respectivos centros de estudio con la realización de múltiples actividades, concertadas para celebrar a lo largo de este viernes el Día Internacional del Estudiante.

Friday, November 10, 2006

Diversifican enseñanza de la computación en Las Tunas


Raúl Estrada Zamora
Agencia Cubana de Noticias

Las Tunas.- Con la apertura de 33 tipos de cursos y una cifra récord de seis mil 483 alumnos, los Joven Club de Computación y Electrónica (JCCE) de esta oriental provincia de Las Tunas diversifican aún más su oferta en el actual ciclo lectivo.

En el período que se inició este mes y concluirá en enero, las 30 instalaciones del territorio, a 670 kilómetros de La Habana, imparten ocho nuevas especialidades, aunque, como en ocasiones anteriores, la de Operador de microcomputadora sigue siendo la más solicitada (57 por
ciento de la matrícula).

También existe gran interés por dominar Microsoft Excell, Power Point, Word y Access, desentrañar los secretos de la arquitectura de las máquinas y conocer todo cuanto sea posible acerca de la Electrónica Básica.

Ada Alicia Duarte, metodóloga provincial de ese popular programa de la Revolución en Las Tunas, informó que se adoptaron medidas para contribuir más eficazmente a la integración social de las personas discapacitadas y de la tercera edad, mediante el manejo de las nuevas tecnologías.

Explicó que como resultado, la incorporación de ciegos, débiles visuales, sordos, hipoacúsicos y limitados físico-motores se incrementó en más del 78 por ciento respecto al período anterior, mientras el número de adultos mayores vinculados a las clases creció en cerca de 70 por ciento.

Desde su creación, en septiembre de 1987, los Joven Club de Computación y Electrónica han graduado a un millón de ciudadanos, mientras hoy pasan de mil los matriculados en los 600 centros de ese tipo que en la Isla coadyuvan a la informatización de la sociedad cubana.

A pesar de los graves efectos del bloqueo de Estados Unidos contra Cuba, este es el único país que ha logrado masificar la enseñanza de la computación, impartiéndola de forma gratuita y ofreciendo iguales oportunidades para su aprendizaje.

Wednesday, November 08, 2006

Aprueban 183 países en ONU resolución contra el bloqueo a Cuba


SEDE DE LA ONU EN NUEVA YORK

Naciones Unidas (Notimex).- La Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) pidió este miércoles por abrumadora mayoría, con 183 votos a favor, el fin del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos contra Cuba.

Este es el decimoquinto año consecutivo que se aprueba el texto presentado por La Habana, que fue aprobado con cuatro votos en contra (Estados Unidos, Israel, Palau, Islas Marshall) y una abstención (Micronesia).

TOMADO DE GRANMA INTERNACIONAL

Tuesday, November 07, 2006

Confirmado Ortega como presidente electo de Nicaragua

Managua, (PL) El sandinista Daniel Ortega quedó confirmado hoy aquí como el presidente electo de Nicaragua, luego de escrutado el 91,48 por ciento de los colegios electorales por parte del Consejo Supremo Electoral (CSE).

Ortega obtuvo el 38,07 por ciento de los dos millones 244 mil 215 votos válidos contabilizados hasta el momento, y exhibe una ventaja de nueve puntos porcentuales sobre su más cercano rival, por lo que su triunfo es ya irreversible.



El ex banquero Eduardo Montealegre, de la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), acumula un 29 por ciento, mientras que en el tercer lugar se ubica el candidato del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), José Rizo, con 26,21 por ciento.



Edmundo Jarquín, postulado por el Movimiento Renovador Sandinista (MRS) quedó finalmente cuarto, con 6,44 por ciento, y el ex guerrillero Edén Pastora, de Alternativa por el Cambio, cerró con un ínfimo 0,27 por ciento.



Para ser proclamado presidente en Nicaragua basta con el 40 por ciento de los votos, o un mínimo del 35 por ciento, siempre y cuando el ganador tenga una ventaja de cinco puntos porcentuales sobre el ocupante del segundo lugar.



Inmediatamente después de conocido el resultado del quinto y último conteo ofrecido por el CSE, Montealegre reconoció su derrota y felicitó al candidato ganador.



Pastora lo había hecho desde ayer, por lo que solo falta escuchar los pronunciamientos de Rizo y Jarquín, quienes habían anunciado que esperarían hasta que se contabilizara el último voto para reconocer a Ortega.



Las elecciones presidenciales y legislativas se desarrollaron en total calma y completa transparencia, según la evaluación hecha por los organismos observadores internacionales y locales que participaron en el proceso.



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Saturday, November 04, 2006

COSAS QUE HEREDAMOS



Junto a la papelería familiar que me dejó mi tía-abuela, María Villegas Trinchet, con la responsabilidad de conservar y entregarla a mi descendiente, guardo esta Real Orden firmado el 13 de marzo de 1810 por Don Fernando Séptimo, Rey de España.

En ese documento el monarca acepta la renuncia de JOSEF GIL MARTÍNEZ MALO del cargo de Alguacil Mayor de la Real Audiencia de Santa Fe de Bogotá y en la que propone a sus hermanos Clemente y Manuel.

También aprueba Don Fernando Séptimo el nombramiento de Teniente de esa misma demarcación a favor de Francisco Gil Martínez Malo, e indica su aceptación a pesar de que este no había cumplido aún los 25 años de edad, lo cual era requisito para asumir dicha responsabilidad.

Los beneficiados en el cargo de Alguacil Mayor de Santa Fe de Bogotá pagaron la suma de 17 mil 570 pesos-oro, según lo dispuesto por el Rey.

En esa Real Orden, Don Fernando Septimo indicaba también a los beneificiados presentarse ante el Virey del Nuevo Reino de Granada , Don Antonio Aman y Borbón, para que extendiera el documento de Alguacil Mayor de Santa Fé de Bogotá, el cual también guardamos con celo, entre otros importantes documentos familiares.

Cómo huyó Orestes Ferrara


HIDROAVION DE LA EPOCA
Por: Ciro Bianchi Ross

Correo: ciro@jrebelde.cip.cu TOMADO DE JUVENTUD REBELDE

Hace muchos años, allá por los lejanos 70, un amigo me contó que había conservado durante décadas un par de corbatas que pertenecieron al político machadista Orestes Ferrara. Era parte de un botín de guerra. El 12 de agosto de 1933, varios estudiantes, entre los que se encontraba mi ya fallecido amigo, trataron de echarle el guante en el puerto de La Habana al Secretario de Estado (Ministro de Relaciones Exteriores) de la dictadura de Machado. No lo consiguieron. El astuto italiano, que alcanzó en la Guerra de Independencia el grado de Coronel, que le otorgó el Generalísimo Máximo Gómez, logró llegar indemne al hidroavión que, como todos los días, saldría del muelle del Arsenal a las tres de la tarde. Poco después se le juntaba su esposa. Pero esta, en la prisa por escabullirse, abandonó u olvidó el equipaje, cuyas piezas se repartirían, como trofeo, sus perseguidores. Como yo sabía que Ferrara, el historiador Ramiro Guerra y el periodista Alberto Lamar fueron los tres últimos funcionarios que abandonaron el Palacio Presidencial minutos antes de que el pueblo lo ocupara y saqueara, siempre supuse que se había dirigido directamente al puerto. Pero no. Ferrara, a pie y en coche, haría aquel día un largo periplo por La Habana.

De esa sabrosa estampa del ayer estaremos hablando enseguida.

EN REBELIÓN ABIERTA
Ferrara regresa a Cuba el miércoles 9 de agosto de 1933, tres días antes de la caída del régimen. Una conferencia internacional, tan rimbombante como inútil, lo había retenido en Londres durante varias semanas, y ya en Washington, donde esperaba poder entrevistarse con el presidente Roosevelt, recibió el llamado perentorio de Machado que lo conminaba al regreso. «Embarca lo más rápido que puedas», ordenaba el dictador en su mensaje. El país estaba en rebelión abierta y el papel de mediador entre la oposición y el gobierno asumido por Benjamín Summer Welles, el embajador de EE.UU., agriaba los ánimos, mientras que la dictadura perdía sostenes y esperanzas.

Los días 10 y 11 son para Ferrara de trabajo incesante. Se entrevista con Machado, que le aseguraba que renunciaría, aunque nunca estuvo muy decidido del todo, y con el embajador Welles, a quien reprocha su gestión mediadora. Conferencia asimismo con representantes de la política tradicional que se oponen a la dictadura. Sabe muy bien que la suerte del régimen está echada. Por eso, sin concurrir al ministerio, apenas sin salir de su casa, labora, con el concurso de Ramiro Guerra, secretario de la Presidencia, en los documentos que avalarán el tránsito de poderes: las dimisiones de los ministros, la solicitud de licencia que hará Machado al Congreso y que equivale a su renuncia, los decretos que darán vida al nuevo gobierno... todo un esqueleto que quiere presentar en orden al general Alberto Herrera, escogido por Machado como su sustituto.

El sábado 12 acude al Palacio Presidencial. Son las ocho de la mañana y en el trayecto desde su casa, en San Miguel y Ronda, al costado de la Universidad, advierte las calles insurreccionadas, pero no agresivas. Allí, para su sorpresa, se encuentra con Machado. Conversan. Dice al dictador que, junto con su mujer, viajará rumbo a Miami en el hidroavión ordinario de las tres de la tarde y que entonces se trasladarían a Nueva York. Machado confiesa que no sabe exactamente lo que hará, pero que quizá se traslade a Las Villas a fin de acampar en el Escambray con un centenar de leales. A otros diría esa misma mañana que acamparía en Rancho Boyeros.

Ferrara le recomienda con insistencia que se olvide del Escambray y salga al exterior, y Machado, en una especie de limbo, da vueltas por los salones de Palacio como quien no sabe si irse o quedarse hasta que decide salir, con la escolta, hacia su finca Nenita, en la carretera de Santiago de las Vegas a Managua. En el despacho privado del Presidente, en el tercer piso de la mansión, junto con Guerra y el periodista Lamar, Ferrara se vuelca de nuevo sobre los documentos que deben estar listos antes de la fuga. El Palacio, tan concurrido en días anteriores, está ahora casi desierto. Lo abandonan los empleados al advertir la ausencia de la familia presidencial, y también los viejos servidores que, ajenos a la política, pasan de un Presidente a otro. Solo una criada permanece en las habitaciones particulares del mandatario. Nadie se lo ha pedido, pero ella las arregla por amor al orden.

SE ALQUILA
Una multitud comienza a darse cita en las afueras del Palacio. La documentación está lista al fin y Ferrara y sus acompañantes se disponen a salir del edificio. La puerta por la que quieren hacerlo está cerrada y ya por fuera colocaron en ella un cartelito que dice «Se alquila». La puerta principal está cerrada también y lo está asimismo la reja de la mayordomía. El policía que debe custodiarla y que sirve como portero desde los tiempos de Estrada Palma, da paseítos nerviosos por el edificio y jaranea con la muchedumbre. Lo localizan y retira el candado. Ferrara pide a sus compañeros que lo dejen salir primero, y afuera agita los papeles que lleva en la mano como para anunciar la renuncia del jefe del Estado. Estalla el entusiasmo y los tres funcionarios que ya dejaron de serlo llegan al coche de la Secretaría de Estado que los espera. La gente no aguarda más y penetra en el Palacio Presidencial.

Guerra baja el primero y busca la Estación de Policía de la calle San Lázaro. Poco después, a la altura de Infanta, desciende Lamar del vehículo. Ferrara se dirige a la casa del general Herrera, en L entre 21 y 23, frente a un costado del hospital Mercedes, para entregar los documentos que a esa altura no interesan a nadie. Lo recibe el embajador Welles, pero no puede ver a Herrera. El general no fue aceptado por el Ejército como sustituto de Machado, y el Presidente es ya, por obra y gracia del embajador, Carlos Manuel de Céspedes, el hijo del Padre de la Patria.

Ferrara, solo, debe volver a pie a su casa. Ve pasar, en su automóvil, a su viejo amigo el nuevo mandatario, que vuelve la cara para no saludarlo. En el camino se le suman algunos amigos dispuestos a protegerlo. Frente a su residencia, mientras atiende al embajador de España, un tiro que era para él mata a un hombre de su confianza. Se hace nutrido el tiroteo y el diplomático insiste en que, junto con su esposa, busque refugio en su embajada. El matrimonio se niega. Reitera el embajador su ruego, pero la respuesta es la misma. Urge hallar una salida. Ferrara pide a su esposa que se traslade a la casa de su hermana, y, antes, prepare el equipaje. Él iría a la casa de un amigo, donde ella deberá reunírsele. Almuerzan, con buen apetito, unos espaguetis napolitanos.

SIN DISFRAZ

Hay saqueos, linchamientos, incendios, detenciones... La radio trasmite noticias inquietantes. Una amiga de la familia ha reservado dos pasajes en el hidroavión de las tres de la tarde. El asunto es llegar al muelle del Arsenal. Ferrara decide hacerlo sin disfraz alguno y en un automóvil descubierto. Como su chofer se niega a conducirlo, lo hará un sobrino y lo acompañará su cuñada. Un sobrino más se suma al grupo en calidad de guardaespaldas. Ferrara irá también armado. La esposa acudirá después, en otro vehículo, luego de realizar gestiones de última hora y recoger las dos pequeñas maletas donde llevan lo imprescindible.

El trayecto hasta el muelle es fácil. Evitan, claro, las vías más concurridas. Por G, el auto tuerce a la izquierda y gana Carlos III. Lo hace a una velocidad normal para no llamar la atención. Muchos reconocen al funcionario del gobierno depuesto; algunos lo saludan y otros lo increpan, pero nadie lo detiene. A la altura de Belascoaín, se ve jaleo dos cuadras más allá, en Reina y Escobar. Están asaltando la casa del senador Wilfredo Fernández. El automóvil gira rápido a la derecha, luego a la izquierda y escapa por la calle Estrella.

En el Arsenal no hay público. Ferrara abona el importe de los pasajes y aunque falta tiempo para la hora del vuelo un empleado le permite pasar al hidroavión. El sobrino que sirvió de custodio se mantiene fuera, armado, a la expectativa. Llega la esposa del ex ministro y ocupa un asiento a su lado.

La tripulación está ya a bordo, y el capitán de la nave, un ruso blanco, dispone que el aparato se separe del muelle y sea atado a la boya. Ya la instalación no está desierta como lo estuvo antes. La ocupa un grupo numeroso de jóvenes estudiantes y también de marineros y soldados. Desde el hidroavión se les ve gesticular, pero no se escucha lo que dicen. Sí es audible desde el aparato la voz de las ametralladoras. Disparan contra la nave. No menos de cincuenta tiros la impactan. El camarero está muerto de miedo, a punto del ataque de nervios, y una bala atraviesa el sombrero de la esposa de Ferrara.

El motor, el motor, grita el capitán y la nave se pone en movimiento. Ya en el aire, el piloto toma una determinación inesperada. Teme que aviones del Ejército cubano lo persigan y ataquen en pleno vuelo, y cambia el rumbo y solo lo rectifica cuando se convence de que no habría peligro.

En el aeropuerto de Miami un grupo de cubanos increpa al ex ministro de la dictadura. Ferrara responde a las agresiones verbales y se lanza contra uno de ellos, pero cuatro policías vestidos de paisano lo contienen y lo cargan hasta un automóvil. La pareja se hospedaría en el hotel Colombus, y de allí la sacan las autoridades de Emigración para ficharla.

Deben comprar ropa. La de Ferrara, que viste de blanco, está en un estado deplorable. Tanto que algún que otro periodista llegó a afirmar que parecía como escapado de una refriega de masas. Lo ha castigado duro el sol de agosto y, entre una cosa y otra, lleva dos días sin cambiarse. Pero no tiene con qué hacerlo porque las pocas pertenencias que recogieron para el viaje quedaron en el muelle del Arsenal, de La Habana, a merced de sus perseguidores que décadas después todavía las mostraban como trofeo y recuerdo de una época en la que el pueblo se vio obligado a tomar la justicia por su mano y que, por su complicidad con la dictadura y con Machado, hubiera pasado la cuenta a Ferrara de haberle echado el guante aquel 12 de agosto.

Friday, November 03, 2006

Coloniales

Por: Ciro Bianchi Ross TOMADO DE JUVENTUD REBELDE

Correo: ciro@jrebelde.cip.cu

Durante la Colonia, siempre antes que la escuela y a veces antes que la misma iglesia, se edificaba la valla de gallos en las poblaciones en fomento. A ella concurrían desde el hacendado opulento hasta el labriego más humilde y blancos y negros cruzaban allí sus apuestas. A las lidias de gallos se les consideró el juego cubano por excelencia. Se dice que llegó a Cuba con Colón y los primeros colonizadores lo extendieron y arraigaron. «Con un tiple, un gallo y un naipe están asegurados el gobierno y la paz de esta Isla», dijo en 1844 el capitán general Leopoldo O’Donnell, Conde de Lucena.

Entre los juegos de cartas, el más popular en ingenios azucareros y zonas agrícolas era el llamado del monte, que nació en España y se perfeccionó en Cuba a golpes de complicadas combinaciones. En clubes y casinos se jugaban el bacará, el 34 y el póker, y la ruleta era usual en ferias y romerías, en tanto que el burro, el 31 y las siete y media hacían el consumo en tabernas y billares. Se jugaba además la charada china.

Era tal la pasión por el juego de azar en la Cuba colonial que el gobierno de la metrópoli decidió explotarla a su favor. Se convirtió en banquero y creó la Real Lotería de la Siempre Fiel Isla de Cuba, cuyo primer sorteo tuvo lugar en La Habana, el 21 de abril de 1812. Se calcula que a partir de esa fecha y hasta 1898, cuando cesó la soberanía española, Madrid sacó de aquí, por ese concepto, no menos de 150 millones de pesos, suma fabulosa para la época.

Los gobernadores de provincia consideraban el juego como su más saneada y jugosa granjería. En lo que al juego se refiere, las ciudades tenían su jerarquía y, de acuerdo con ella, los garitos pagaban un impuesto clandestino a las autoridades locales, obligadas a su vez a «tocar» a sus superiores. Gobernantes hubo que cada siete o quince días recorrían su área de gobierno colectando en persona la «multa», temerosos de que sus subordinados les dieran la mala.

DEPARTAMENTOS Y PROVINCIAS
La primera división político-administrativa de la Isla de Cuba se llevó a cabo en 1607. En virtud de una Real Cédula de ese año el territorio se subdividió en dos jurisdicciones, la de La Habana, que se extendía por treinta leguas al este de esa plaza, y la de Santiago de Cuba, que comprendía todo el espacio restante.

En 1772, cuando se realizó el primer censo general de población, la Colonia se repartió en tres departamentos y 18 jurisdicciones, pero en 1850 se suprimió el departamento Central y su territorio pasó a formar parte de los departamentos adyacentes. Así ciudades como Sagua la Grande, Santa Clara, Cienfuegos, Remedios, Sancti Spíritus y Trinidad cayeron en el departamento Occidental, que contó a partir de entonces con 21 jurisdicciones, mientras otras diez correspondían al departamento Oriental: Santiago de Cuba, Baracoa, Guantánamo, Manzanillo, Bayamo, Jiguaní, Holguín, Las Tunas, Puerto Príncipe y Nuevitas.

La división político-administrativa de 1870 estableció seis provincias que se subdividían en términos municipales. Fueron Pinar del Río (25 municipios), La Habana (34), Matanzas (21), Santa Clara (27), Puerto Príncipe (5) y Santiago de Cuba (15). Aunque algunos de esos nombres variaron y desaparecieron términos municipales y aparecieron otros, esa estructura se mantuvo hasta 1976.

MIL CUEROS POR UN OBISPO
Tiempos hubo en la Isla en que, debido a la escasez de moneda y a la pobreza del territorio, el cuero y la torta de casabe se convirtieron en medios circulantes y fueron medida general de valores.

Cuando en 1660, el corsario británico Henry Morgan se apoderó de Puerto Príncipe, los vecinos de esa villa la rescataron mediante el pago de quinientos bueyes y la sal necesaria para su adobo. Antes, en 1604, el corsario francés Gilberto Girón, que había secuestrado a fray Juan de las Cabezas Altamirano, Obispo de Cuba, exigió por su devolución mil cueros pelados y una buena cantidad de arrobas de tasajo.

FACULTADES OMNÍMODAS
Nunca, durante toda la Colonia, hubo un civil al frente del gobierno de la Isla. España consideró siempre a Cuba como una base militar de operaciones en el Golfo de México y en el Caribe y de manera invariable escogió a sus gobernadores entre las filas de la milicia. A partir de 1825 la Corona otorgó facultades omnímodas a esos gobernantes. Poderes extraordinarios esos, inherentes al mando de una plaza fuerte en tiempo de guerra. Con uno de ellos, José Gutiérrez de la Concha, se puso en práctica la más brutal y arbitraria de las medidas cuando se negó a los cubanos el derecho de pedir.

En su organización marítima, Cuba era una Comandancia General de la Marina española. Tenía al frente a un contralmirante, que radicaba en La Habana y ejercía el mando durante tres años. Esa Comandancia se subdividía en siete «provincias»: La Habana, Santiago de Cuba, Sagua la Grande, Remedios, Cienfuegos, Trinidad y Nuevitas.

De los 18 primeros gobernadores que tuvo la Isla, ocho pasaron del gobierno a la prisión y algunos murieron en ella. No se sabe si por el rigor que dio lugar al escarmiento o porque la delincuencia política comenzó a disfrutar de mayor impunidad, de los 36 gobernadores que luego de aquellos 18 se sucedieron hasta la toma de La Habana por los ingleses, solo cuatro vieron interrumpido su gobierno con un fin tan desastrado.

EL QUE CORTA EL BACALAO
El tasajo y el bacalao eran renglones básicos en la alimentación de los esclavos. La fuente de energía consistía en una especie de salcocho, el funche o serensé. Tenía una base feculosa abundante —harina de maíz, plátano o boniato— y a ella se adicionaba una porción generosa de carne salada o bacalao. Con ello, dicen los especialistas, se proporcionaba al esclavo «una verdadera sensación de hartazgo». Consumían además una elevada cantidad de azúcar, en diversas formas, más plátanos y otras viandas que ellos mismos cosechaban. Algunos ingenios azucareros, enclavados en regiones ganaderas, daban a sus esclavos carne fresca, que resultaba más barata que el tasajo.

Durante la última década del siglo XVIII y la primera del XIX, el hambre hizo mella en las dotaciones de esclavos en Cuba. Las guerras napoleónicas, el conflicto anglo-americano y la gesta independentista en la América Latina, distorsionaron el mercado internacional y afectaron la compra en el exterior de aquellos productos que se destinaban a la alimentación y al vestuario del esclavo. A ello se unió una crisis interna en la producción de alimentos en Cuba y el auge de la población esclava.

La situación se hizo tan grave que los negros andaban semidesnudos y en algunos ingenios la ración se redujo a una sola comida al día —viandas salcochadas, por lo general.

Las plantaciones que carecían de una gran cocina central para preparar la comida de la dotación, acostumbraban a dar al esclavo, uno a uno, el correspondiente tasajo o bacalao crudo que ellos llevaban al bohío donde guisaban sus alimentos, escribe el historiador Manuel Moreno Fraginals. Y añade:

«Lógicamente, el encargado de cortar la carne o el bacalao y repartirlo, tenía en sus manos un poder excepcional en estos años de hambre. Hoy, transcurrido más de siglo y medio, en los sectores populares el concepto de autoridad se relaciona con la frase “el que corta el bacalao”».

COMIDA DE NEGROS
Aunque las clases altas lo comían a escondidas, el tasajo fue en Cuba, durante la Colonia, comida de negros. Todavía en 1840, en los contratos de alimentación para los trabajadores del «camino de hierro» —la línea del ferrocarril— se precisaba que la carne fresca era para los blancos, y el tasajo, para los negros.

La ración de comida para los trabajadores blancos la conformaban ocho onzas de pan fresco; nueve de arroz; tres de garbanzos y diez de carne fresca, en tanto que la de los trabajadores negros consistía en ocho onzas de tasajo; ocho plátanos machos grandes y 18 onzas de harina de maíz. En la elaboración de las comidas para blancos se agregaban, cada cien raciones, cuatro libras de manteca de puerco y dos libras de sal. Las raciones para negros incluían la sal, pero la manteca se reservaba solo si se servía harina de maíz.

CRIADOS POR TODAS PARTES
Durante la Colonia el servicio doméstico era francamente malo. La norteamericana Eliza Mc Hatton-Ripley, que vivió aquí durante años, dice en De bandera a bandera, su libro sobre Cuba, que vio por todas partes a criados calmosos que no se apuraban en sus tareas. Todo lo tenían compartimentado y cada criado necesitaba de otros criados a su servicio. Una doncella no servía más que a una señora, una nodriza solo atendía a un niño, una costurera solo cosía y remendaba para una dama, un cocinero no podía preparar una comida sin ayuda y un marmitón no bastaba para limpiar una cocina...

Una familia a la que visitó Eliza, y que no era de las más ricas, tenía 25 criados a su servicio y aun así se sentía algo inasistida e incómoda. Sus costumbres domésticas asombraban a la escritora. Dice:

«La madre y dos de las hijas tenían una doncella cada una en asistencia constante, para recoger un pañuelo o recomponer una cinta desarreglada, cuando no se ocupaban de vestir o desvestir a sus damas, cuya ocupación principal era la toilette. El mayordomo de ébano tenía tres asistentes vestidos de blanco, un cocinero preparaba las carnes; otro, los dulces y refrescos; ninguno de los dos tenía tiempo para lavar una cazuela o secar una taza. Así, varios marmitones se sentaban alrededor de ellos en espera para ayudar. Había una lavandera para la ropa blanca de la casa, otra, para las sayas y vestidos, y una tercera para la ropa de los sirvientes, y un chino que solo lavaba pantalones, chalecos y levitas. Ninguno de ellos tenía tiempo para encender el fuego o traer el agua que usaban, eso estaba a cargo de criados de menor categoría (...).

«Criados, criados por todas partes y con muy poco quehacer. Todos parecían interpretar papeles en una comedia de cómo no hacer nada».

Concurso Nacional “Maestro, profesión de infinito amor”



Por Graciela Guerrero Garay

LAS TUNAS - Tres de las cuatro enseñanzas que concursaron en el certamen nacional “Maestro, profesión de infinito amor” obtuvieron premios, lo que permitió a Las Tunas clasificar como la provincia más destacada de Cuba en esta actividad, demostrativa de cómo las transformaciones que acontecen en la Educación rinden ya frutos en el aprendizaje y aprovechamiento de las tecnologías de la información entre el gremio estudiantil.

La noticia se hizo pública en Villa Clara, sede de la reunión de Divulgación que realiza el Ministerio de Educación con todos los directivos de esta actividad en cada uno de los territorios de la Isla, enfrascados en garantizar un período lectivo marcado por la calidad docente, a partir de los nuevos conceptos que rigen el trabajo en los distintos tipos de escolarización y cuando la matrícula escolar sobrepasa los dos millones de alumnos, desde los primeros grados hasta la Universidad.

Los estudiantes de este Balcón Oriental cubano que merecieron los lauros son Yaritza Roja Guerra, de la Secundaria Básica Wenceslao Rivero; María Elena Santos Pupo y Yamila Arzuaga Carralero, del Instituto Preuniversitario de Ciencias Exactas Luis Urquiza Jorge, todos en esta ciudad capital, y Yailén Reyes Pérez, del Instituto Politécnico de Economía Ramiro Guerra Guerra, del municipio de Puerto Padre.

Tras la emoción de haber recibido los lauros en un concurso de esta trascendencia nacional, los discípulos tuneros se sienten doblemente gratificados por traerle a la región la condición de Más Destacada de Cuba, en momentos donde el MINED aquí redobla esfuerzos para erradicar algunas deficiencias que ponen en peligro el exitoso desarrollo del proceso docente, relacionadas con el aprendizaje de los alumnos, el sistema de control y su efectividad y los métodos y estilos de dirección en los distintos escalones de mando.

Concluyó Las Tunas reforestación de sus fajas hidrorreguladoras


Por Hernán Bosch

Las Tunas, Cuba, (AIN) Con la plantación este año de 575 hectáreas de árboles se concluyó la reforestación de las fajas hidrorreguladoras en la provincia cubana de Las Tunas, a unos 670 kilómetros al este de La Habana.

El cumplimiento de la tarea tiene una particular importancia para este territorio oriental, pues es el de menor promedio histórico de lluvias en Cuba, con apenas unos mil milímetros cada año.

La siembra de árboles maderables y frutales en las zonas periféricas de las presas, micropresas, lagos y ríos es esencial para proteger los embalses de la erosión, además de contribuir a preservar la flora y la fauna, mejorar el régimen de lluvias y beneficiar el ecosistema en general.

En el caso particular de Las Tunas, esta labor se llevó a cabo principalmente en los alrededores de las 23 presas y micropresas existentes en sus ocho municipios, capaces de almacenar en conjunto unos 350 millones de metros cúbicos de agua.

Luego de vencer la forestación de las fajas hidrorreguladoras, los silvícolas tuneros impulsan en lo que resta de 2006 el cumplimiento de su plan global de siembra de árboles para el año, ascendente a cinco mil 138 hectáreas, de las cuales sólo restan unas 200.

Afectada tradicionalmente por una pertinaz sequía que se recrudeció en la última década, esta zona registró en el año en curso un notable mejoramiento del régimen de lluvias, por lo que en la actualidad acumula más de un 80 por ciento de su capacidad total de embalse de agua.

A nivel nacional, Cuba trabaja con el objetivo de terminar en 2007 la plantación arbórea en los alrededores de sus 221 presas y 770 embalses menores, así como también en las márgenes de los ríos y lagos.

Wednesday, November 01, 2006

Rigoberta Menchú destacó resistencia de Cuba frente al bloqueo



Guatemala,(PL) La guatemalteca Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz, comparó hoy la resistencia del pueblo cubano frente al bloqueo de Estados Unidos con las culturas milenarias que aún están vivas y contribuyendo a la humanidad.



"Estados Unidos no ha podido doblegar la voluntad del pueblo cubano ni a su Revolución y yo admiro profundamente esa capacidad de resistencia", dijo la dirigente indígena en declaraciones exclusivas a Prensa Latina.



Menchú repudió el bloqueo que por más de cuatro décadas mantiene Estados Unidos contra la mayor de las Antillas y lo calificó como una práctica de genocidio.



Afirmó que a pesar del cerco económico, financiero y comercial, Cuba no obedeció jamás las reglas norteamericanas, lo cual es un honor para ese pueblo.



"Creo que la resistencia de Cuba se asemeja a las culturas milenarias, cuando venían los conquistadores y mataban a sus líderes, destruían su memoria y, sin embargo, aún están vivas y contribuyendo a la humanidad", puntualizó.



Menchú consideró que ese es un ejemplo de que cuando un pueblo está decidido a defender su dignidad y su autodeterminación, lucha y muere por ello porque esa es su convicción.



La Premio Nobel de la Paz envió un saludo al presidente Fidel Castro, con quien -dijo- tuvo el placer de compartir muchas reuniones en La Habana y le deseó una pronta recuperación.



El mandatario cubano convalece de una intervención quirúrgica intestinal que le fue practicada en julio pasado, cuando anunció la delegación temporal de sus funciones al frente del país.



Además de condenar el bloqueo contra Cuba, la líder indígena repudió el muro que levantará Estados Unidos en su frontera con México para frenar a los inmigrantes, y expresó su convicción de que "un día va a caer, al igual que caerá el imperio".



"Los mayas dejaron muy claro en sus códices que todos los imperios tienen un momento para caer y yo espero que el norteamericano lo haga pronto porque está fundado en la cultura de la muerte y ha sacrificado a muchos pueblos", concluyó Menchú.



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Rogge reconoce contribución extraordinaria de Cuba al movimiento deportivo internacional



• El Presidente del COI inauguró en presencia de Raúl Castro
el Congreso Mundial Deporte para Todos

POR ANNE-MARIE GARCIA...... TOMADO DE GRANMA INTERNACIONAL

LA HABANA (AP). — Contribuir a que el deporte sea más atractivo para los jóvenes y los mayores, estimular la práctica del deporte entre las minorías y en los países en desarrollo, son los desafíos del Congreso Deporte Para Todos, afirmó Jacques Rogge, presidente del Comité Olímpico Internacional.

Rogge presidió la apertura del Congreso junto a Raúl Castro, primer vicepresidente cubano.

"Menos de la tercera parte de los jóvenes del mundo tienen actividad física, por eso todos estamos frente al desafío de contribuir a que el deporte sea más atractivo para ellos y los adultos de más de 60", manifestó el Presidente del COI.

Rogge, quien llegó el martes 31 a esta capital, se comprometió en nombre del COI a "promover los resultados de este Congreso a través de la cooperación internacional por intermedio de la comisión Deporte Para Todos".

El COI le concedió la organización del Congreso a Cuba "como reconocimiento a un país que tuvo una contribución extraordinaria al movimiento deportivo internacional en los últimos anos", comentó Rogge.

El Congreso, que patrocinan junto al COI la Organización Mundial de la Salud y la Asociación General de Federaciones Deportivas Internacionales, tiene como tema central "Riesgos y beneficios de la actividad física".

José Ramón Fernández, presidente del Comité Olímpico Cubano, a cargo de la organización, dijo que unos mil participantes de un centenar de países estarán en los debates.

Fernández recalcó que en la Isla el deporte y la cultura física son obligatorios en las escuelas y auguró que "los intercambios de experiencias y conocimientos en este Congreso serán beneficiosos para el desarrollo del deporte en el mundo".

Rogge afirmó que durante su estancia en Cuba aprovechará para "ver la situación del deporte en el país".

La visita del Presidente del COI ocurre en un momento en que el béisbol, el deporte nacional en Cuba, lucha por regresar al programa olímpico de donde fue excluido por ese organismo.

Se espera que las autoridades deportivas cubanas hablen del tema con Rogge, pero éste fue bastante explícito a su llegada cuando afirmó que "el béisbol no tiene la universalidad que tiene el fútbol".

El béisbol fue eliminado del programa olímpico de los Juegos del 2012 en una votación del COI en julio del 2005 y analizará su posible regreso a las olimpíadas del 2016 en una reunión que se celebrará en el 2009.

Calidad en Salón de la Plástica en Las Tunas

Por Róger Aguilera

Las Tunas, (AIN) El Salón de Artes Plásticas de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) de este año, en la provincia de Las Tunas, testifica el sostenido incremento de la calidad de los pintores del territorio.

Para escoger entre las mejores obras el jurado tuvo una difícil tarea, hasta que decidió otorgarle el primer premio a la serie Troyanos, de José Miguel Costa Martínez.

El segundo lugar correspondió a Yamila Comas Vargas, con el título Maternidad, y Rodney González Avila, resultó el tercer ganador, con su obra 200 libras de humo, mientras Jesús Vega recibió mención y a Alexis Roselló le fue entregado el premio del Consejo de las Artes Plásticas.

Los autores de las piezas, de la primera línea del vanguardismo, hicieron patentes los aires renovadores que los inspiran y sus trazos evidencian que no están sujetos al academicismo.

La máster Bárbara Carmenate, al dejar abierta la muestra en el Centro Provincial de las Artes Plásticas, en la ciudad de Las Tunas, significó que el Salón lo presiden imágenes figurativas y abstractas, quiméricas, auténticas o reprobables, que se traducen mediante el paisaje.

Este certamen es convocado solo para los miembros de la UNEAC, mientras en el de La Plástica en Abril pueden participar todos los pintores del territorio, de ahí que se considere el principal evento de Las Artes Plásticas de Las Tunas.

Curioso hallazgo en comunidad rural de Las Tunas



Por Maryla García Santos

Arroyo Blanco es una pequeña comunidad rural situada en los límites entre las provincias de Las Tunas y Holguín, en el municipio de Jesús Menéndez, antigua Chaparra.

De visita allí, en casa de unos familiares, me preguntaron si alguna vez había visto un molino de maíz de la época de los aborígenes, y al responder negativamente me invitaron a conocerlo. Por supuesto que mi curiosidad despertó ante la posibilidad de descubrir en pleno siglo XXI un objeto con 500 años de existencia.

El Molino

José Balada, así se llama el dueño del curioso artefacto, se sintió complacido de mostrar el objeto que según me contó perteneció a su bisabuelo. Hoy José tiene 76 años de edad y no recuerda que en su casa el maíz se moliera con otro instrumento. Por esas razones el suponía que su existencia datara del tiempo de los primeros habitantes de Cuba.

En medio del patio, tapado con unos pedazos de cinc, estaba el molino. Dos grandes piedras, planas y redondas, con un hueco en el centro para echar los granos. La única diferencia –según José- con el original es el soporte de hierro entre las dos piedras, que anteriormente estaba hecho de una madera dura, al igual que la caja en que está empotrado.

Para accionarlo se coloca un palo largo en un pequeño orificio de la piedra superior y se le da vueltas. Si se quiere que el producto salga más fino se echa mayor cantidad de granos, y si se quiere más grueso, se echa menos. Su esposa, Nené, nos mostró cómo funcionaba perfectamente.

Posible origen

Intrigada por la procedencia del raro utensilio, después de regresar a mi casa hice una búsqueda en Internet, para comprobar si los aborígenes cubanos fabricaron algún instrumento similar.

Mi indagación, por el contrario, me llevó al otro lado del mar. En Grecia, aproximadamente en el año 500 A.N.E., se superpusieron dos piedras planas y redondas que echas girar por medio de un asa trituraban los granos. Desde ese entonces el movimiento circular se ha aprovechado para moler con eficiencia los cereales.

En la región española de Asturias, el molino de piedras circulares apareció por primera vez durante el período de la dominación romana. Su funcionamiento consistía simplemente en hacer girar la piedra superior sobre la inferior, accionándola manualmente con una palanca dispuesta de forma lateral.

Todo esto me hace suponer que el molino de piedra que vi en Arroyo Blanco perteneció a nuestros colonizadores europeos. Probablemente, fue traído a Cuba por el bisabuelo de José, de origen isleño, o quizás por el padre de aquel.

A pesar de la incógnita sobre el origen y antigüedad, lo cierto es que el molino sigue siendo útil a sus dueños y a los vecinos.







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